Los topes de estacionamiento, también conocidos como topes de rueda, bloques de estacionamiento o topes de acera, son bloques elevados diseñados para ayudar a los conductores cuando estacionan sus vehículos.
Se utilizan para proteger las estructuras que rodean el aparcamiento, incluidos los edificios y otros vehículos estacionados. Hoy hablaremos de las diferentes opciones a tener en cuenta a la hora de elegir un material para los parachoques de su aparcamiento.
PARACHOQUES DE HORMIGÓN PARA APARCAMIENTOS
La mayor ventaja de utilizar parachoques de hormigón para topes de estacionamiento es que son muy pesados. Esto hace que sean muy estables una vez fijados en su lugar, y hacen un gran trabajo para evitar que los vehículos pasen por encima de sus lugares de estacionamiento designados. También son muy duraderos y resistentes, y como están prefabricados, son muy fáciles de instalar. El hormigón también puede pintarse y repintarse, por lo que puede personalizarlos según sus necesidades.
TOPES DE GOMA PARA APARCAMIENTOS
Otro material habitual para los parachoques de aparcamiento es el caucho reciclado. Es resistente a los rayos UV, a la humedad, al aceite y a los derrames químicos; sin embargo, el caucho no es tan pesado como el hormigón y, por lo tanto, no detendrá los vehículos con tanta eficacia. Son fáciles de instalar, pero una de las principales desventajas es que normalmente sólo están disponibles en negro y amarillo.
Esto puede ser un inconveniente para las empresas que necesitan parachoques de aparcamiento de distintos colores o que desean cambiar de color después de unos años de uso. Por último, dado que los parachoques de goma para aparcamientos se fabrican a partir de neumáticos reciclados, su procesamiento y fabricación los encarece.
PARACHOQUES DE PLÁSTICO PARA APARCAMIENTOS
La última opción para los parachoques de aparcamiento es el plástico reciclado. En general, son duraderos y requieren poco mantenimiento, sin embargo, si se exponen al calor extremo, existe la posibilidad de que se derritan. Los parachoques de plástico son relativamente fáciles de instalar, pero son los más caros de los tres tipos de bloques de aparcamiento.